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Mostrando entradas de mayo, 2017

FALDAS, A LA IZQUIERDA; PANTALONES, A LA DERECHA

Es evidente que en los últimos años estamos asistiendo a un evidente retroceso de las políticas de igualdad de nuestro país. Tras el impulso, al menos normativo, que vivimos en la VIII Legislatura, los años de crisis y el continuado gobierno del PP se han convertido en la alianza perfecta para frenar los avances en materia de igualdad de género y para consolidar una lógica neoliberal con tan mal casa con los derechos humanos en general y con los de las mujeres en particular. Uno de los ámbitos en los que ha sido más evidente ese paso atrás ha sido el educativo. Recordemos como la LOMCE (https://www.boe.es/buscar/pdf/2013/BOE-A-2013-12886-consolidado.pdf) no solo alteró los presupuestos y objetivos esenciales del sistema sino que también eliminó la tímida pero necesaria “Educación para la ciudadanía” al tiempo que legitimaba los conciertos celebrados con centros en los que se diferenciase por razón de sexo. Una previsión, recurrida por el gobierno andaluz ante el Constitucional y qu

CONTRA EL PSOE DOMESTICADO

Justo antes de que empezara la campaña de las primarias socialistas publiqué en estas mismas páginas un artículo titulado «Lo que se juega el PSOE», en el que trataba de explicar como, más allá de personalismos, el partido se enfrentaba al reto de superar los paradigmas del pasado o, por el contrario, prorrogar unas estructuras y un modelo que poco sirven ya para el siglo XXI. El mismo día de su publicación recibí el mensaje de un militante socialista de nuestra ciudad que me felicitaba por él y que me decía que estaba totalmente de acuerdo conmigo pero que él no podía decirlo. Ese mensaje, con toda la carga antidemocrática que conllevaba de miedo y de sumisión, representa a la perfección las perversas dinámicas que el PSOE, muy especialmente en Andalucía, ha desarrollado durante las muchas décadas instalado en el poder y sin una alternativa capaz de hacerle sombra. El poder, no lo olvidemos, produce monstruos cuyo peligro es directamente proporcional a la mediocridad de quienes lo

LA PÉRDIDA DEL PADRE Y DOS MUJERES PERDIDAS

Mentiría si dijera que la excelente primera película de Lino Escalera es solo una película sobre la pérdida de un ser querido. Por supuesto que es también el relato de cómo afrontar ese duro momento vital en el que nos vemos obligados a asumir la caducidad de los días, pero es mucho más que eso. Es también, y es lo que más me interesa, la historia de dos mujeres, las dos hermanas que de muy distinta manera se enfrentan al final del padre. Dos mujeres que asumen su eterna tarea de cuidadoras y de las que vamos descubriendo, con apenas unos trazos, sin grandes estridencias, que son perdedoras, que han sido maltratadas por la vida, si bien de distinta manera, que ambas son esclavas de un lugar en el mundo que no les satisface del todo, que casi podríamos afirmar que se limitan más a sobrevivir en la corriente que les ha tocado en suerte que a nadar contra ella. La dura historia de No sé decir adiós, que nos enfrenta sin estridencias ni sentimentalismos a lo que supone una enfermeda

“Cedo mi cuerpo libremente para que lo usen los demás. Pueden hacer conmigo lo que quieran”

“Cedo mi cuerpo libremente para que lo usen los demás. Pueden hacer conmigo lo que quieran. Soy un objeto. Por primera vez siento el poder que ellos tienen” El cuento de la criada , de Margaret Atwood Tras leer el   artículo sobre la gestación por sustitución   publicado hace unos días por el profesor Manuel Atienza, mucho me temo que no ha leído el espléndido libro   El cuento de la criada   de Margaret Atwood ni tampoco ha visto ningún episodio de   la adaptación televisiva que hace unas semanas ha estrenado HBO . Me atrevo a recomendarle ambas porque en materia de derechos humanos es muy importante tener la percepción emocional de aquellas situaciones que viven las personas que ven pisoteada su dignidad. Solo desde esa “empatía imaginada”, que tan bien explica la historiadora de los derechos   Lynn Hunt , es posible construir argumentaciones jurídicas que no pierdan de vista el aliento ético que debe inspirar las reglas de una convivencia democrática. No cabe duda de que la

SALVADOR SOBRAL: OTRA MASCULINIDAD ES POSIBLE

El triunfo de Salvador Sobral el pasado sábado en Eurovisión, además de mostrarnos entre otras cosas, y como él mismo dijo, que la música, la música de verdad, nada tiene que ver con los fuegos de artificio, supone también una oportunidad para demostrarnos que otra masculinidad es posible. Es decir, en un contexto tan hipermasculinizado y androcéntrico como el del Festival (recordemos como pese a “celebrar la diversidad” los tres presentadores eurovisivos fueron hombres, y como la mayoría de las chicas competidoras insistieron, de una forma u otra, en mostrarse como cuerpos fuertemente sexuados), consumido y aplaudido muy especialmente por un público gay, el portugués supuso una ruptura con el discurso normativo que nos revela lo que significa ser un hombre de verdad. Un discurso en el que mucho me temo la incidencia de la diversidad afectivo/sexual está siendo mínima porque la masculinidad hegemónica, unida a los dictados de un mercado que busca hombres ante todo que consuman y hag

EL PATIO DE RAFAEL

Hace ya algunos años que siento que nos han robado los patios. El turismo todopoderoso, gestionado por unos representantes más preocupados por el orden dominante que por el amoroso de la vida, ha convertido mayo en una especie de parque temático en el que todos nos convertimos en masa que fotografía con el móvil. Una masa en la que los individuos solo importamos para ser contabilizados y formar parte de una estadística. Una pieza más en una larga cadena de montaje que suma para un producto final que no sé bien quién venderá y que en todo caso dará regocijo a los mercaderes. Un número, así me sentí cada vez que el vigilante de turno le daba al click que me convertía en argumento para un nuevo record, en pretexto para instituciones que solo entienden el desarrollo en clave económica, en una especie de aval para que los empresarios gozosos sigan contratando a camareros y camareras de forma precaria. Aunque es cierto que tengo la sensación de que estos patios de mayo no son los que un

¿ES LA HORA DEL FEMINISMO PARA EL PSOE?

S Siempre he pensado que la tarea esencial del feminismo no ha sido ni es coser las prendas rotas o remendar las vestimentas deterioradas. Eso es más bien lo que les ha tocado   hacer a las mujeres en el reparto de funciones mediante el que el patriarcado ha consolidado el dominio masculino.   Es decir, mientras que nosotros luchábamos por la patria, ellas cosían las banderas. Las teóricas y activistas feministas, de las que continúo aprendiendo cada día, y que me obligan permanentemente a revisar mi posición privilegiada y los paradigmas que siempre me beneficiaron como varón, me han enseñado que el objetivo del feminismo es diseñar otro patrón y poner las bases de otro tipo de pacto. Es decir,   no asumir el traje masculino y ajustarlo para que le siente bien a ellas sino articular, desde la teoría y la praxis, un nuevo modelo de subjetividades y de relaciones entre ellas que haga posible de una vez por todas la equivalencia política de los géneros. Ese ambicioso horizonte su

TÚ NO ERES COMO OTRAS MADRES

Aunque incluso un periódico como El País sugiere en un inmenso reportaje que el regalo ideal para una madre son cosméticos que le ayuden a no envejecer, y aunque es evidente que el día de hoy es uno más de los muchos que El Corte inglés y similares inventaron  para tener un pretexto con el que seguir explotando a sus trabajadores y trabajadoras, quiero aprovechar este espléndido domingo para alegrarme de que mi madre, además de ser una señora coqueta  y a la que le encanta continuar espléndida a sus muchos años, nunca ha dejado de alimentar su mente y de mostrar curiosidad por otros mundos que no son el suyo. Si algo he heredado de ella, además de esos ojos glotones, es su pasión lectora. No en vano me cuenta que cuando estaba embarazada de mí, leía novelas mientras estaba en la cocina preparando la comida. Mi madre es una de esas mujeres que demuestran que ser lector/a es convertirse en un sujeto para el que la vida crece más a lo ancho que hacia adelante. Solo lamento que le tocar

CRISTINA, MANUELA Y PACA

En un país como el nuestro en el que tener un trabajo ya no garantiza no ser pobre, y en el que las mujeres continúan siendo las más vulnerables en un mercado laboral que no entiende de dignidad, es más necesario que nunca hacer un ejercicio de memoria que reconozca la lucha de todas esas ciudadanas que siempre tuvieron claro que es imposible la democracia sin la efectiva garantía de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras. En un país tan desmemoriado como el nuestro, y en el que la memoria continúa teniendo un marcado sesgo androcéntrico, es urgente que recuperemos el hilo de todas esas mujeres, pioneras en tantos frentes, que continúan ausentes en los libros de texto. En un día como hoy, en el que deberíamos recordar como las medidas de austeridad adoptadas con el pretexto de la crisis están provocando una imparable feminización de la pobreza, nos podría servir como referente y como impulso la trayectoria de tres mujeres que fueron y son esenciales en la construcción

DE HOMBRES HERIDOS Y PERDONES QUE SALVAN

Hacía tiempo que no veía una película tan formalmente exquisita y tan equilibrada desde el punto de vista narrativo como la última del siempre interesante François Ozon. Más allá de sus virtudes formales, empezando por un blanco y negro tan poético que solo se vuelve color cuando se evoca al ausente, Frantz  es un bellísimo alegato contra los horrores de la guerra. El director francés, inspirándose de lejos en la obra  antibelicista de Rostand titulada Remordimiento, nos regala un cuidadísimo relato sobre la dificultad y la necesidad del perdón. Sobre la complejidad moral que supone cerrar las heridas que en el alma dejan los disparos y la sangre.   La historia de Adrian, el soldado francés que deja flores en la tumba sin cadáver de un alemán muerto en la primera guerra mundial, el Frantz del título, es también una recreación de cómo el patriarcado y la patria se alían a través de las fratrías viriles creando enemigos y odios, y de cómo las mujeres acaban siendo las más sufrient